Me Maté A Mi Mismo


Acababan de tocar mi puerta, me pregunté quién coño le anda tocando la puerta a uno a las 4 de la mañana, debe ser un niño pellizca testículos que lo hace para molestarme, aunque es raro, a las 4 de la mañana es muy difícil ver a un niño en la calle, bueno, me levanté a ver, puse el ojo en el inútil vidriecito que supuestamente debería dejarme ver quien está al otro lado, pero solo se ve un vidrio roto, bah, no importa, abriré, dije, abrí y solo ví un hombre con una capucha corriendo. Quién sería, me pregunté, traté de alcanzarlo, me puse el primer pantalón y el primer suéter con capucha que encontré y corrí tras él, cuando ya lo había alcanzado cruzando la calle, apareció otro encapuchado, sacó un arma y con un tiro en la cabeza lo fulminó, luego me vio, apuntó hacia mí, traté de moverme pero mis músculos estaban congelados del terror. Y de repente, jaló el gatillo...

Su arma se trabó, ya estaba sintiendo la bala atravesando cada uno de mis órganos, había muchos vecinos que estaban viendo, asustados por el disparo inicial, lo que estaba pasando, se comenzaron a oír las sirenas de la polícía, y el tipo comenzó a huir. Yo me agaché para ver quien era el encapuchado muerto, no pude ya que su cara estaba desfigurada por el disparo, creo que era una pistola vieja, potentes pero poco confiables. Llegó la patrulla y me comenzaron a interrogar, les conté lo que había pasado y me dijeron que iban a hacer todas las investigaciones necesarias, ojalá, le respondí, las patrullas se alejaron y me dejaron sólo en la fría calle cubierta de nieve por el frío y desgraciado invierno, y ahí me comenzé a preguntar: Quién era ese? porqué alguien querría matarme? Lo único que pensé fue en, que el encapuchado que subió a mi casa era un pandillero intentando robarme para pagar una deuda de droga y el que lo mató era el vendedor al cual le debía ese dinero y me quería matar por ser un testigo. Ojalá eso quede así...

Han pasado un par de días desde aquel incidente, de repente suena mi teléfono, es la policía, me informan que el encapuchado muerto, soy yo...

Impactado, le dije que debía haber un error, ya que era imposible que yo estuviera muerto y vivo al mismo tiempo, me respondió que estaba de acuerdo en que era un error, pero las evidencias llevaban a eso.

¿Cómo es posible eso? me pregunté, salí en busca de ayuda espiritual (no creo en eso, pero de repente me serviría para levantar ánimos) Salí con mi vieja pistola, una Magnum que perteneció a mi abuelo, salí con ella por miedo a encontrarme con el tipo que quiso matarme. Hablé con el cura y le expliqué detalle a detalle lo que me había pasado, el cura era un hombre alto, encorvado ya por la edad, llevaba su sotana ya raída por las polillas, pero tenía fama de dar unas misas que sacaban el alma de cualquiera adelante, además de eso, había escuchado que era un hombre estudioso. Impresionado, me comentó la historia de Sísifo, un hombre que fue condenado a subir una roca a la punta de una montaña y luego lanzarla costa abajo, cuando Sísifo se acercaba a la cima, el peso lo vencía y caía, cansado, hasta la base y ahí comenzaba a subir la roca de nuevo.

Confundido, le pregunte: ¿Y que tiene que ver eso conmigo?

-Tal vez estés condenado a completar una misión...

Caminaba de vuelta a mi casa pensando en lo que me había dicho el cura, ¿Una misión incompletable? ¿Que significaría eso? De verdad esto es cansante, tal vez una taza de café me recuperaría del frío que me estaba matando. Cuando ya estoy llegando observo que un tipo sale corriendo de mi edificio, parecia que tenia un arma y venía hacia mi, estaba muy asustado ya que llevaba la misma capucha del tipo que quizo matarme la otra vez, así que saqué mi arma y disparé y con un certero tiro en la cabeza, lo maté.

cuando vi atrás de él, vi que alguien venía, era, Yo?, Asustado, no pude pensar otra cosa y volví a jalar el gatillo, pero la maldita pistola se había trancado, vi la cantidad de personas que se estaban asomando por sus ventanas y sólo salí corriendo. Me escondí rápidamente en un callejón y cagado hasta las patas me pregunté, ¿Que mierda está sucediendo?

Pensando con más calma, decidí ir a advertirme que no saliera, pero después me dije: Si yo soy el que me mató, ¿No sería mejor matarme?, ¿Sería considerado suicidio, homicidio?, Un minuto, creo que el olor a marihuana de los vagabundos de al lado me está pegando, mejor me voy a advertirme.

Subo las escaleras hasta mi casa y toco la puerta, miro la hora: 4 a m, y pensé: A la mierda, se está repitiendo todo de nuevo!!! Y de inmediato comenzé a bajar las escaleras mientras oí que se abría la puerta tras de mí y me llamaban, bajé las escaleras con la cabeza agachada mientras sentía que los pasos se acercaban. Arranqué a correr y mientras corría vi a un tipo saliendo del otro lado de la carretera, me vio con ojos asustados y muy tarde me di cuenta de que era yo, cuando me dí cuenta ya había sacado la pistola y jalado el gatillo

Solo sentí la caliente bala atravesando mis sesos..




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